Por Mariangel Suárez
Algunas parejas no lo lograron. El efecto covid-19 les quitó, no solo el olfato y el gusto, también se llevó lo que sentían. Aunque, los peores casos fueron los que sintieron que no podían soportar el «encierro » el físico y el que lleva impreso la palabra compromiso.
Durante este raro período que se gestó durante el inicio de 2020, hubo de todo. Para los entendidos, jamás se había notado tanto un mercurio retrógrado como en este tiempo. Los psicólogos, psiquiatras y afines vieron aparecer cientos de casos en los que las llamadas «diferencias irreconciliables», discusiones, reconciliaciones o rupturas estuvieron bastantes repetidas entre sus nuevos y recurrentes pacientes. Como ven, hubo de todo y hasta aprendimos a besar con tapabocas.
Aunque no todo fue tan malo. Bueno depende del caso. Pero lo que sí pude comprobar fue el baby boom pandémico. Pues claro la vida continúa, y ya saben, todo el día en casa ni Netflix lo pudo evitar.
Pero vamos a ver, si todo cambió el amor no se podía salvar. Aplicaciones para conseguir «amig@s» estuvieron en su mejor momento, bueno se han visto casos. Pero de que fue y sigue siendo una buena fórmula para entablar relaciones, lo es.
Lo cierto es que el amor se abre camino. No importa las circunstancias. Lo hace como sea, entre algodones, bombones y chocolate o dando codazos para ganarse un espacio.
Como yo lo veo. El amor que te sube a las alturas o que te baja a lo más profundo, siempre valdrá la pena. Por lo vivido, por lo bueno, lo malo, lo ingrato. En fin, sentirlo siempre será una fuerza mayor que tú y, a veces, dejarlo ir también será una gran fuerza que te arrastrará.
Así que este este día del amor, hay que celebrar por los que están, por los que se fueron y por los que vendrán.
Feliz día…
