El Gobierno alemán ha declarado «persona non grata» a 40 diplomáticos rusos de la embajada de Berlín, a los que se ha instado a abandonar el país, informó hoy la ministra de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock.
Se trata de personas que «día a día trabajan contra nuestra libertad y contra nuestra cohesión social», según el comunicado emitido por Exteriores, donde se alude a la «increíble brutalidad» de la cúpula rusa, plasmada en las imágenes procedentes de la ciudad ucraniana de Bucha.
«Tememos que se hayan producido imágenes parecidas en otras poblaciones ocupadas por las tropas rusas«, prosigue el comunicado, según el cual ante esa «brutalidad» debe responderse desde la «fortaleza de nuestra libertad».
Los diplomáticos a los que se ha declarado «persona non grata» son miembros de la embajada rusa cuyo trabajo, según Exteriores, es «una amenaza para todo aquel que busca protección en nuestro país».
Baerbock, de los Verdes, anuncia asimismo «otras reacciones», que serán consensuadas con sus socios, en alusión al endurecimiento de las sanciones que previsiblemente adoptará la Unión Europea (UE).
Asimismo se compromete la ministra a «apoyar» el refuerzo de tropas en el flanco este de la OTAN, aunque sin concretar su alcance. Alemania rechaza hasta ahora la posibilidad de un embargo a las importaciones de gas, petróleo o carbón rusos, pese a las fuertes presiones de socios como Polonia o los países bálticos para dar ese paso.
La primera potencia europea depende fuertemente de esos suministros, ya que un 55 % del gas que importa procede de Rusia, mientras que los porcentajes relativos al carbón o el petróleo se sitúan alrededor del 50 %.
El ministro de Economía y el Clima, el asimismo verde Robert Habeck, ha admitido muy a su pesar que no se puede cortar de forma inmediata con esos suministros.
Francia sigue los pasos de Alemania, cuya ministra de Exteriores, Annalena Baerbock, anunció este lunes la expulsión de un «elevado número de diplomáticos» rusos. Según informaciones de la AFP, serían 40.
Estas decisiones llegan tras anuncios similares en en los últimos días de varios países europeos. Lituania expulsó al embajador ruso por tras la «horrible masacre de Bucha». La presión internacional se recrudeció sobre Moscú tras el descubrimiento de numerosos cadáveres de civiles en la región de Kiev, especialmente en Bucha.
El jefe de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, anunció que estudiarán nuevas sanciones contra Rusia por estos hechos, que el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, calificó de «genocidio».
El Tiempo