Por Anahís Cruz

Andrea Igliozzi siempre amó contar historias, crear ideas y con las palabras relatar lo que imaginaba u otros le contaban. Buscaba darle forma a lo que ella de niña veía como cuentos, sin embargo, en ese jugar a contar cuentos jamás pensó que terminaría dedicándose a escribir, pero como periodista profesional. Mucho menos pensó en que llegaría a ser presentadora ante las cámaras de televisión y que ello además la harían merecedora de 7 premios Emmy Awards a pesar de su corta edad.

Igliozzi es una talentosa y ocurrente periodista que nació y se crio en el Paraíso, Caracas, y tiene 25 años de edad, y aunque desciende de italianos y libaneses se siente «tan criolla como la arepa». Sin un ápice de vergüenza y entre risas reconoce que no habla árabe ni italiano.

Dejar Venezuela

Desde que se graduó de bachiller en el año 2015 se marchó a Florida, EEUU como tantos venezolanos que han dejado su país con la idea de que la familia pudiera estabilizarse económicamente a costa del sacrificio de dejar el país. La animaban sus proyectos de estudiar periodismo en el país de las libertades y sin el temor que le infundía Venezuela porque considera que «no se puede ejercer en plena libertad».

Establecida en EEUU la pandemia mundial por Covid-19, como a miles de millones de personas en el mundo, le jugó una mala pasada, el negocio familiar tuvo que cerrar sus puertas, Andrea y su familia quedaron en la calle, sin nada, sin trabajo, sin casa, viviendo con unos familiares y en un país que no era el suyo. «Vivimos momentos difíciles, los ahorros se acabaron, se acabó el capital que nos trajimos de Venezuela, lo trabajado aquí en EEUU también se terminó, fueron momentos difíciles».

Andrea se vio obligada a ponerle una pausa a sus estudios de periodismo para trabajar y replantearse nuevas estrategias que le permitieran retomarlos más adelante. Después de mucho trabajar, hasta en tres turnos por día pudo ahorrar y retomar su carrera.

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Luces, cámara y…

Desde niña e incluso ya avanzada en sus estudios universitarios Andrea coqueteaba con la idea de dedicarse a la actuación, de hecho, se preparó como actriz, tomó cursos, hizo teatro, se subió a las tablas y le hizo un guiño a la televisión. Buscó oportunidades en el mundo de la interpretación y fue como le dedicó muchas horas y años a su y preparación como actriz, sin saberlo o sin tenerlo muy claro, el mundo de las cámaras y las luces le apasionaban.

Pero fue en la Universidad Internacional de la Florida cuando cursaba la carrera de Periodismo Audiovisual y Social Media Marketing que se le despertó su pasión por el periodismo, por investigar y por contar historias. Desde hace poco más de dos años vive en Sacramento, California donde trabaja con «Univisión 19» como reportera multimedios. «Hago de todo un poco, yo misma me grabo y grabo a los demás, edito, escribo hago mis gráficas, hago mis cámaras, me presento», cuenta Andrea a quién se le siente y ve la emoción y pasión cuando habla de su trabajo.

«Siempre quise estudiar comunicación social, amo el periodismo de investigación, contar historias es mi pasión» aseguró Andrea.

Describe lo que hace en su trabajo y que la hicieron merecedora de siete premios Emmy. «Nosotros aquí hacemos de todo, todo tipo de historias, hay que investigar, nos gusta ir más allá de lo que se pueda».

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«Hago de todo un poco, yo misma me grabo y grabo a los demás, edito, escribo hago mis gráficas, hago mis cámaras, me presento», cuenta Andrea a quién se le siente y ve la emoción y pasión cuando habla de su trabajo.

«Siempre quise estudiar comunicación social, amo el periodismo de investigación, contar historias es mi pasión» aseguró Andrea cuando llegó el momento de describir lo que hace en su trabajo y que la hicieron merecedora de siete premios Emmy. «Nosotros aquí hacemos de todo, todo tipo de historias, hay que investigar, nos gusta ir más allá de lo que se pueda».

Llegan los éxitos

«Yo nunca me imagine que me iba a ganar un premio Emmy, menos que me ganaría siete, el primer premio me lo gané por una investigación sobre los ríos en Sacramento que están sucios y contaminados, llenos de bacterias y Covid. El segundo Emmy me lo gane tras cubrir los incendios en California por 3 días consecutivos, yo no me lo esperaba, fui por ir y me lo gané», dijo Andrea quien entre nervios, risas y orgullo parece seguir sin poderlo creer.

Igliozzi nació en tiempos de revolución, en la Venezuela en proceso de decadencia, lo que hoy conocemos como «la crisis país». Tal vez eso despertó en ella el sentimiento de querer hacer justicia en cualquier espacio, defender al débil, resaltar lo bueno o denunciar los abusos, resaltar emprendimientos, visibilizar las historias anónimas que merecen ser contadas.

 

“A Venezuela se lleva en el alma”

Orgullosa de su origen venezolano, Andrea sueña con seguir narrando historias, investigar todos los días y ganarse un lugar con mayor reconocimiento, ella quiere regresar a Miami y llegar al noticiero nacional, «esa es mi meta». Quiere que su nombre resuene, que los venezolanos puedan sentirse orgullosos por sus logros, así como ella se siente orgullosa de ser venezolana y poder representar los colores patrios.

Considera que el país donde naces, y te formas siempre se lleva en el alma, en el corazón. Cada calle de su amada Caracas está retratada en su mente, y el gentilicio de país en cada acción que emprende.

Tiene un mensaje para todos los migrantes que han salido de Venezuela con sueños como único equipaje: «Si se puede, yo salí de El Paraíso, de Colinas de Vista Alegre, si yo pude, todos pueden, échenle ganas, échenle pichón», dijo.

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